El 9º Congreso Internacional de María Auxiliadora, que se celebra del 29 de agosto al 1 de septiembre en Fátima, comenzó con gran alegría y entusiasmo. Reuniendo a miembros de la Familia Salesiana de diversas partes del mundo, el encuentro, que tiene lugar cada cuatro años, es una ocasión única para celebrar y reflexionar sobre la misión salesiana y la devoción a Nuestra Señora Auxiliadora, Madre y Maestra de los Salesianos.

Desde primeras horas de la mañana se respiraba un ambiente de alegría y fiesta en Fátima. El Centro Pablo VI, donde se celebra hasta el 1 de septiembre la IX Internacional de María Auxiliadora, comenzó a animarse con la llegada de grupos de diferentes países. Banderas de diferentes naciones, sonrisas y abrazos calurosos, así como una inmensa alegría, transformaron el lugar en un espacio de reencuentro de la Familia Salesiana como familia.

Entre los primeros en llegar se encontraban grupos de América Latina, trayendo consigo la alegría contagiosa de sus pueblos. Luego llegaron grupos de Europa, África y Asia, todos con la riqueza de sus tradiciones y el fervor de su devoción.
Para muchos, el viaje fue largo, pero el cansancio pronto dio paso a la alabanza. «Doy gracias a María Auxiliadora por estar hoy aquí», repetía una y otra vez un participante de Caracas (Venezuela).

Varios voluntarios recibieron a los participantes con una sonrisa y la alegría típica del carisma salesiano y, a su llegada, cada uno recibió un kit con un rosario, un pañuelo, una botella de agua reutilizable, un bolígrafo y un llavero. «El mundo salesiano está aquí reunido a los pies de la Señora del Sueño», dijo el P. Tarcízio Morais, Inspector de los Salesianos de Portugal y Cabo Verde.

Ceremonia de apertura: emoción y espiritualidad
Con la llegada de prácticamente todos los grupos, a las 17h comenzó la apertura oficial del IX Congreso Internacional de María Auxiliadora. El acto contó con la presencia del P. Tarcízio Morais; el Nuncio Apostólico en Portugal, Arzobispo Ivo Scapolo; el Obispo de la Diócesis de Leiria-Fátima, Mons. José Ornelas; el Obispo Auxiliar del Patriarcado de Lisboa, Mons. Joaquim Mendes; el Vicario del Rector Mayor, P. Stefano Martoglio; la Madre General de las Hijas de María Auxiliadora, Madre Chiara Cazzuola; entre otras muchas personalidades.
En su discurso de apertura – pronunciado en las cinco lenguas oficiales del Congreso – el P. Tarcízio Morais, Inspector de los Salesianos de Portugal y Cabo Verde, comenzó destacando la devoción de Don Bosco a María: «Fue en Don. Fue en la devoción de Don Bosco a María Auxiliadora donde encontró la fuerza para afrontar todos los desafíos», subrayó. Para el Inspector, este Congreso es especialmente importante porque pretende «pensar en el futuro de la devoción a María Auxiliadora».
El P. Joan Luis Playá, delegado del Rector Mayor para la Familia Salesiana, destacó a María como «Maestra de la misión salesiana», subrayando que somos «una familia mariana».
A continuación intervino Gabriel Cruz, animador espiritual mundial de ADMA, quien destacó la importancia del sueño que tuvo Don Bosco hace 200 años: «Es maravilloso pensar que el sueño que tuvo Don Bosco hace 200 años sigue existiendo dentro de los grupos de la Familia Salesiana», dijo.
Sor Carmen Lucrécia Uribe, animadora mundial de ADMA, comenzó diciendo que las Hijas de María Auxiliadora son un «monumento vivo a María Auxiliadora» y que, por ello, deben tener la «audacia» de mantener «vivo» el sueño.
El discurso final corrió a cargo de Renato Valera, presidente de ADMA Primaria, quien hizo hincapié en que todos somos «una pequeña parte del sueño de Don Bosco».
En un momento marcado por el color y la alegría, a continuación tuvo lugar la representación de «Sueños de nueve años» de Don Bosco, a cargo del grupo de jóvenes Arte&Sal, del Centro Juvenil Salesiano de Funchal.
La presentación de siete imágenes de Nuestra Señora de diferentes países fue uno de los momentos más destacados de la ceremonia. Las imágenes procedían de Angola, Argentina, México, India, Filipinas, Eslovaquia e Italia.
Tras la apertura oficial del IX Congreso Internacional de María Auxiliadora, la Eucaristía fue presidida por el Obispo de Leiria-Fátima, Mons. José Ornelas. En su homilía, y destacando el texto evangélico, que recordaba el martirio de San Juan Bautista, Mons. José Ornelas subrayó la importancia de la llamada de Dios en la vida de cada uno de nosotros, así como la importancia de María en esta llamada.
Durante el momento de acción de gracias, Marta Pereira da Costa, antigua alumna del Musicentro de Lisboa, interpretó con la guitarra portuguesa la canción «Ave Maria Gratia Plena».

Buenas noches del Vicario del Rector Mayor: un momento en familia
La primera jornada del IX Congreso Internacional de María Auxiliadora concluyó con las buenas noches del Vicario del Rector Mayor, P. Stefano Martoglio.
«Es para mí un honor y un privilegio estar aquí en este Congreso», comenzó. Tras enviar un saludo a todos de parte del Cardenal Ángel Fernández Artime, el P. Stefano Martoglio recordó la pertenencia de la Familia Salesiana a la Virgen María y su confianza en ella.
El P. Stefano Martoglio concluyó la velada recordando unas palabras de Don Bosco: «Si estamos aquí es porque la Virgen nos ha traído».
La diversidad cultural de los participantes, unida a la devoción a Nuestra Señora Auxiliadora, creó un ambiente único de celebración y renovación espiritual durante la primera jornada del IX Congreso Internacional de María Auxiliadora.